Los laboratorios de las grandes multinacionales bullen de actividad en busca del aparato estrella del futuro, ese que marcará nuestro ocio en unos cuantos años. Sin embargo, hasta que llegue, son muchas las pistas que nos indican por donde irán los tiros.
Es difícil prever que invento de los que están todavía en capilla puede hacerse con el título de “ killer” en los próximos años, la etiqueta que distingue al aparato que es imbatible en su campo; más que imbatible, que extermina a sus competidores. Cientos son los gadgets que optan a este título; la mayoría de ellos, por designios del marketing, se quedarán en el cajón de los olvidados. Otros nunca llegarán a ver la luz. Pero, por lo menos, todos tienen en la originalidad su tarjeta de presentación.
“Hay mercado, en realidad, para todos, aunque sea como objeto epatante. Pero el mercado masivo será solamente para unos pocos”, afirma Juan Julián Merelo, profesor de la ETS de Ingeniería Informática de Granada y autor del blog “ Atalaya: desde la tela de araña ”. Y es que, según este experto tecnológico, “Los designios del mercado global son inescrutables”.
La mezcla de ordenadores y retroproyectores en un solo aparato es una de las corrientes más demandadas. El EyeMove PC es un proyecto para embutir ambos aparatos en un disco del tamaño de un fressbee . Permitirá ver películas, jugar a videojuegos o usar la computadora sin necesidad de pantalla, ya que se puede proyectar sobre cualquier superficie. Es totalmente portátil e inalámbrico y pesará menos de 1 Kg.
Los juegos de ordenador saltan de la pantalla plana a las tres dimensiones reales. El Xblocks es un videojuego proyectado sobre una estructura real. El jugador debe mover sus personajes por todas las caras físicas del escenario, que asemeja al de los juegos de plataformas pero con la novedad que proporciona una dimensión más. La realidad virtual también se mueve. La VirtuSphere es, actualmente, la única tecnología que permite moverse en un escenario de realidad virtual andando. Para ello, el usuario se coloca dentro de una gran pelota metálica (o plástica traslúcida) que va girando sobre si misma.